GCP: SIN SOLUCIÓN PROBLEMAS DE LA UNIDAD ACADÉMICA DE FILOSOFÍA Y LETRAS, DE LA UAGro.

lunes, 9 de marzo de 2015

SIN SOLUCIÓN PROBLEMAS DE LA UNIDAD ACADÉMICA DE FILOSOFÍA Y LETRAS, DE LA UAGro.

COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS CONSEJEROS UNIVERSITARIOS,

COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS UNIVERSITARIOS, TODOS.

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE GUERRERO

P R E S E N T E.

Los abajo firmantes, profesores e investigadores adscritos a la Unidad Académica de Filosofía y Letras (UAFyL) de esta Universidad, nos dirigimos a Ustedes como representantes del órgano de gobierno máximo de nuestra Institución, para solicitar un acuerdo responsable y serio encaminado a la solución del problema que está afectando desde hace casi tres meses el buen funcionamiento de nuestra escuela. Problema motivado por la actitud autoritaria, soberbia y corruptelas académicas con que ha conducido quién ha desempeñado las funciones de dirección de la escuela.

A continuación exponemos los hechos y los planteamientos de este colectivo universitario, preocupado por reconstruir las relaciones y sanear las condiciones de trabajo. Pedimos ser escuchados y atendidos.

1. La compañera Zenaida Cuenca Figueroa, por dignidad, profesionalismo humanista y salud institucional debe retirarse de las funciones de dirección de la UAFyL. No tuvo ni tiene capacidad para convocar y conducir con respeto, prudencia y profesionalismo ético el trabajo académico de una institución humanista, de respeto y fomento a la diversidad de pensamiento filosófico, teórico, político y artístico. No es, ni trata de ser, factor de armonía en el trabajo institucional; más bien ha generado lo contrario, cultiva la división y confrontación entre la comunidad escolar.

2. La situación que vive la UAFyL no es un conflicto poselectoral, como se ha tratado de minimizar y simplificar desde Rectoría; eso quedó superado con la entrega de la dirección a la Dra. Zenaida Cuenca Figueroa. Tampoco es una animadversión misógina como se pretende distraer a la comunidad escolar y evadir responsabilidades. Se trata de un problema que ha surgido por malas decisiones y acciones, por la manera equivocada de dirigir la escuela. Ha violado leyes elementales del quehacer académico con la adulteración de calificaciones de alumnos a través de la sustitución de firmas de los profesores autorizados para aplicar exámenes extraordinarios, creyendo tener facultades para todo. Ella tiene perfil académico en literatura pero ha aplicado o validado exámenes extraordinarios en las licenciaturas de filosofía, sociología e historia, sin fundamento legal alguno, más que el uso y abuso del poder. Eso es corrupción académica y es suficiente para que la protesta sea justificada.

3. La Dra. Zenaida Cuenca Figueroa se obsesionó con el puesto de directora y ha hecho todo para dirigir sola la UAFyL, por encima de los órganos colegiados y de representación, como son el Consejo de Unidad y las academias de profesores. Instauró un estilo de dirección autoritario, unipersonal y clientelar. Sus principios de gobierno escolar son los de “la autoridad soy yo”, similar al viejo monarca romano de “yo Claudio”, o el tristemente célebre Luis XIV recordado por su frase, “el estado soy yo”. Ha transgredido el espíritu humanista, democrático y plural con que se debe guiar la función educativa de la UAGro.

4. El poco tiempo que ha estado como directora la compañera Zenaida Cuenca Figueroa se ha caracterizado: por su autoritarismo y soberbia que la llevaron a ignorar, minimizar y descalificar a los otros, a quienes no piensan igual que ella, incluyendo a sus compañeros de trabajo y quienes fueron sus maestros en esta escuela; la falta de transparencia en la gestión y distribución de los recursos de la institución que ha utilizado para promover y mantener -corporativamente- a grupos estudiantiles, así como la asignación privilegiada de becas y permisos a sus allegados para pequeños comercios dentro del área escolar; la participación directa y el auspicio de violaciones al Contrato Colectivo de Trabajo al “defender” a invitados y herencia de plazas que se convierten en base al margen de la legislación contractual, cuando tenemos profesores interinos y por horas con más de quince años de servicio, sin que se les otorgue la basificación.

5. La relación entre dirección y academias está quebrantada. Estamos en proceso de evaluación para la acreditación de los programas de licenciatura que aquí se imparten y corre el serio riesgo de truncarse. No pueden ser acreditados programas académicos que trabajen en condiciones como lo estamos haciendo en la UAFyL. En el proceso de evaluación, las academias han hecho su tarea, pero la dirección no ha creado el entorno propicio para que la acreditación sea realidad. El Posgrado en Humanidades que nació en este ciclo escolar, incorporado al PNPC, debe ser también reflejo del trabajo armónico de su Núcleo Básico de profesores-estudiantes y autoridades. Al ser afectado por el conflicto escolar se pone en riesgo su evaluación y permanencia en el CONACYT.

6. A nivel nacional y estatal vivimos una grave crisis de inseguridad y de credibilidad en la clase política gobernante de todos los colores, por el entramado de corrupción y acción con el crimen organizado. Debemos ser muy cuidadosos en nuestro hacer y decir, y no aumentar la vulnerabilidad de que actualmente somos objeto como sociedad e institución. Por esa razón reprobamos la participación directa o la complicidad de la compañera Zenaida Cuenca en la elaboración y publicación de anónimos de tipo policiaco en los que se advierte una perversa denuncia y difusión de información estrictamente personal (algunos por enfermedades de adultez), que ponen en riesgo el empleo y la integridad física de compañeros nacionales y extranjeros. El uso de panfletos anónimos, para tratar de desacreditar a compañeros académicos entregados y comprometidos con la educación en Guerrero, es cobardía y expresan un vacío de ideas; es vergonzoso para una institución que, por naturaleza, debe tener una vocación de libertad y abierta al pensamiento humanista universal y específico. Esas evidencias demuestran definitivamente que es inviable el trabajo académico bajo la dirección de personas que apoyan estas acciones.

7. Para finalizar, reiteramos que queremos recuperar y reconstruir las relaciones y el ambiente académico de nuestra institución; continuar generando y trasmitiendo conocimientos sociales y humanistas, en condiciones de libertad de pensamiento teórica, filosófica, política, religiosa y creación artística. Queremos reconstruir el tejido social de la UAFyL, deshecho ahora por la ambición de poder, de pobreza profesional y ausencia de autocrítica y vocación democrática. En esta tarea de institucionalizar nuestro trabajo, no somos catorce como se nos ha tratado de ningunear; somos mayoría de maestros y alumnos; en esta mayoría están los estudiantes que no se corrompen por una calificación fácil ni se corporativizan por dádivas a cambio de incondicionalidades políticas. Esto no es lo que inculcamos a nuestros estudiantes, sino valores de dignidad y responsabilidad en su formación profesional.

8. Por todo esto pedimos, consejeras y consejeros universitarios, escuchen las voces plurales de este colectivo que formamos parte de la comunidad universitaria y aporten inteligentemente su apoyo para una solución favorable a la comunidad de la UAFyL. En esencia, nos pronunciamos y le pedimos al H. Consejo universitario:

a) Su sensibilidad con las preocupaciones de la comunidad de la UAFyL y acuerde el saneamiento académico. Saneamiento que depende de la renuncia de la Dra. Zenaida Cuenca Figueroa como directora y dar lugar a un nuevo proceso de elección de dirección y representación. Pedimos anteponer los objetivos y propósitos del desarrollo institucional a la defensa de una persona, como se ha manifestado hasta ahora, por parte de funcionarios de la Rectoría.

b) Un pronunciamiento solidario y contundente de condena y de rechazo a la perversa y despreciable “política del anonimato” que denigra a la UAGro y pone en riesgo la integridad física de compañeros trabajadores de la UAFyL y de la misma Universidad

c) Un llamado enérgico y responsable a los grupos políticos de la Universidad a que se abstengan de propiciar y cobijar, desde el poder que detentan, la participación de profesores jubilados en los asuntos internos de las escuelas, si con esa participación ahondan los conflictos, enconos y descomposición moral de las instituciones educativas de la Universidad Autónoma de Guerrero.

Somos seres humanos en construcción permanente. Somos resultado de la historia con aciertos y errores, y así hacemos también la historia. La injusticia y la violencia que caracterizan los tiempos que vivimos, son expresiones reales, no existen apartadas del ser humano. Las construimos con nuestra acción u omisión; el sistema social alienta o inhibe conductas, pero nosotros también somos responsables de reproducir o no esas acciones. El mundo de hoy, visto como contexto, ofrece un panorama cada vez más insostenible, en el que impera el egoísmo, el individualismo, el autoritarismo, la corrupción, la fuerza bruta, entre otras expresiones negativas. La UAGro, como la UAFyL, no están exentas de esas realidades. La situación conflictiva que estamos viviendo como comunidad, queremos superarla sin saltos, sin rupturas, asumiendo la responsabilidad que nos corresponde como universitarios. No queremos destruir, queremos reconstruir y articular la vida institucional de la UAFyL, caracterizada por su vocación crítica, humanista y democrática.

Chilpancingo, Gro., marzo 5 de 2015

ATENTAMENTE

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE GUERRERO.

UNIDAD ACADÉMICA DE FILOSOFÍA Y LETRAS

PROFESORAS Y PROFESORES DE LAS

ACADEMIAS DE FILOSOFÍA, SOCIOLOGÍA, HISTORIA, LITERATURA Y DE LA MAESTRÍA EN HUMANIDADES.

Álvaro López Miramontes.

Camilo Valqui Cachi.

Candelario Degante Castañeda.

Claudia Esperanza Rangel Lozano.

Duval Reyes Guerrero.

Eduardo González Franco Campero Calderón (Consejero de Unidad),