>> Figueroa amenaza irse del PRI
Marco Polo Aguilar Villanueva/ZONA SÍSMICA. A tres meses de las elecciones en Guerrero la descomposición política vive sus peores momentos en el estado. El mundillo político está hecho bolas. El fantasma de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, desaparecidos el 26 de septiembre del año pasado en Iguala, persigue sin piedad a los candidatos a cargos de elección popular en el inicio de sus campañas, sean del partido que sean.
En los partidos con mayor aceptación entre los guerrerenses, el Revolucionario Institucional (PRI) y el de la Revolución Democrática (PRD), se respira un olor fétido. De revolucionarios, ambos partidos no tienen más que el nombre.
La izquierda se encuentra totalmente fracturada, a pesar de las esmeradas declaraciones de sus dirigentes por hacer creer que hay unidad.
La única damnificada del desaguisado podría ser la diligente Beatriz Mojica Morga, candidata del PRD a gobernadora del estado y -tal vez- la aspirante sin cola que le pisen, pero falta de imagen y propuestas.
Militantes del partido en el estado se han encargado de filtrar que Beatriz Mojica era de las funcionarias consentidas de Aguirre Rivero y que hasta un lazo de consanguinidad la une con el ex mandatario con licencia. Hay que recordar que Mojica Morga era de las funcionarias con más responsabilidad y actividad en la entidad por haber sido la secretaria de Desarrollo Social.
La corriente que apoya a Mojica Morga conocida como la de los Chuchos (por los ex dirigentes del partido Jesús Zambrano y Jesús Ortega), no han encontrado la fórmula para unir a la izquierda. Muy por el contrario, tienen en Carlos Navarrete a un presidente del Comité Ejecutivo Nacional de “su” (porque es suyo) partido en espera de que sus propuestas fracasen para restregárselas en el rostro – a los Chuchos- y recordarles que nunca estuvo de acuerdo con ellas.
En el PRI las cosas no son diferentes. El fin de semana el diputado local Rubén Figueroa Smutny amenazó que abandonaría el PRI si se llega a imponer a un candidato externo para presidente municipal de Acapulco. Advirtió a la dirigencia de su partido que se podría dar una “desbandada de militantes” y que no deben olvidar que “Guerrero se gana o se pierde en Acapulco”.
La semana pasada Figueroa Smutny hizo público que no participaría como aspirante al municipio de Acapulco y tres días después, como los sabios, cambió de opinión y siempre si se registrará. “Lo que pasa es que Manuel Añorve me quiere sacar de las listas”, asegura el legislador.
Figueroa Smutny ha intimidado al propio candidato del PRI, Héctor Astudillo Flores, a quien etiquetó como “títere” del diputado federal Manuel Añorve.
Mientras que la última encuesta realizada la primera quincena de febrero por la empresa Parámetro Investigación, da cuenta de más de 6 puntos de diferencia entre el candidato del PRI Héctor Astudillo con 43.39 por ciento por 37.05 de la perredista Beatriz Mojica.
Los candidatos de otros partidos sólo aprovechan llevar agua a su molino pero sin sacudirse el fantasma de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa que recorre el estado.
Y frente a este contexto de crisis, el (des) gobernador Rogelio Ortega Martínez sigue batallando con actos de desobediencia civil, como bloqueo de carreteras, toma de casetas de peaje, manifestaciones vandálicas que evitan la libre circulación y destruyen oficinas de partidos y enfrentamientos con fuerzas públicas con resultados nefastos.
Esta evidente ruptura del orden público ha contribuido al deterioro en la imagen de la administración interina de Rogelio Ortega, si es que alguna vez la tuvo, y hasta lo han echado de actos públicos debido a su insensibilidad e ineptitud para resolver los problemas que agobian a la entidad.
Ante una de las peores crisis políticas y sociales de su historia reciente, en el estado lo único cierto es que los guerrerenses ya no quieren más de lo mismo y los candidatos tendrán que hacer nuevas y mejores propuestas, pero sobre todo una campaña política diferente, más cercana a la gente….¿O tu que piensas amable lector?
Movimientos Telúricos…De los 46 diputados de la 60 Legislatura del Congreso de Guerrero, 29 solicitaron licencias para brincar a otros “hueso”, sólo 17 concluirán la encomienda para la que fueron elegidos por el pueblo…esos son los famosos “chapulines”….Sin la presencia de los tres anteriores precandidatos a la gubernatura por el PRD, Sebastián de la Rosa, Sofio Ramírez Hernández y Víctor Aguirre Alcaide, para Beatriz Mojica Morga “la izquierda está unida y fortalecida”…en su primer acto de campaña la candidata del PRD sostuvo que "Vamos a gobernar con valentía, no vamos a permitir impunidad. La corrupción y la violencia tiene que ser terminada"…desde luego al acto tampoco asistió el Movimiento Jaguar, del senador Armando Ríos Piter…Héctor Astudillo Flores, candidato del PRI-PVEM por la gubernatura de Guerrero dio inicio a su campaña de una manera diferente…en su casa particular en la ciudad de Chilpancingo ofreció un desayuno a los medios de comunicación de las siete regiones del estado en el que estuvo acompañado por su señora madre, Carmén Flores, su esposa Mercedes Calvo y sus dos hijos, Héctor Javier y Ricardo en donde manifestó que de ganar las elecciones el próximo 7 de junio, en su gobierno no habrá nepotismo, influyentismo, ni negocios familiares, obviamente que se refirió al gobierno perredista de Ángel Aguirre Rivero, en donde hoy varios de sus familiares se encuentran en una prisión de alta seguridad…Por cierto el senador Alejandro Encinas declaró el fin de semana que no parará hasta ver al gobernador con licencia de Guerrero en la cárcel por muchos delitos que ya se le han comprobado…“En Guerrero es necesario dar un golpe de timón. Existen instituciones de gobierno lesionadas con políticas obsoletas y populistas, que tienen como consecuencia una población desconcertada por la falta de liderazgos. Hoy, Guerrero necesita políticos sensibles, que ejerzan el poder con sentido humano y terminen con este desequilibrio social en el que actualmente vivimos”, expresó Alberto López Rosas, candidato al gobierno del estado por el Partido Humanista al visitar el municipio de Iguala como parte de su campaña política. (entresemana.mx)