domingo, 22 de septiembre de 2013

falcotitlan Altruismo Hugo Falcón Páez

La conducta humana necesita más del bien, porque ello trae amor, y no del mal, que es producto del egoísmo y la estupidez.

Es un hecho que va a seguir lloviendo en Guerrero, en Acapulco, en Chilpancingo, en decenas de comunidades. Zonas rurales y urbanas, así como en diversos puntos de las siete regiones. Ahora la propuesta directa es, qué hacen los gobernantes, regidores y legisladores, dónde están los diputados locales y federales, los senadores. Sí, están ayudando, aunque usted no lo crea. Pero los embates de la naturaleza pueden más, no hay culpas. Sólo es la vida misma, impredecible. Una explosión volcánica, un sismo, un maremoto e incluso un incendio en un cerro, así es la madre Tierra. Pero más allá de lo físico, no podemos dejar pasar que deben ser castigados con la ley, aquellos que cobran el precio más alto en los productos no perecederos, alimentos en general como tortillas, bolillo, legumbres, verduras, frutas, carne de res, pollo, huevos, agua potable, en fin. Aquellos que han robado artículos de línea blanca y electrónica, así como muebles. Asimismo. Deben castigar y ejercer la justicia para los funcionarios públicos o burócratas, que llevan un título, como por ejemplo, líderes o secretarios de algún partido político, ediles, legisladores locales y federales. Las imágenes están ahí, y serán utilizadas para su campaña política y escalar un poquito más, es de conocimiento general que mantener el poder es un conflicto moral y ético, no cabe duda. Pero a casi un año de empezar las precampañas para ganar alguna curul, escaño o cubículo, publican en cualquier medio el auxilio otorgado. Se nota con énfasis que no hay interés humanitario, sólo es una inversión pseudoestratégica para hacer creer al groso de la gente, mucho más a quienes reciben esa bolsa o caja de víveres. Y bien, decía un amigo y compañero de los medios de comunicación, "no presumas la cámara, presume la foto", así va la rapiña de la política local y estatal, inclusive, nacional. La labor debe ser altruista, no labor proselitista. De qué sirve que un cantante de fama internacional preste su avioneta o jet, si en el particular de los casos no tiene una revisión u orden oficial e institucional, a veces mucho ayuda el que no estorba, y hoy aplica. Porque si esa aeronave cae, por desgracia o por el mal tiempo climático, qué pasará entonces con el control en ese rubro por parte del gobierno federal. Otro punto son los centros de acopio, los cuales tienen nombre y apellido, colores y logotipos. ¿Por qué si al recibir sumas multimillonarias las dependencias no gubernamentales, no ayudan de una manera magnánima? ¿No les alcanza o rinde lo que captan en esas campañas anuales de colecta? Sin embargo, no tienen límite esos individuos de "sociedad", personajes que gozan de negocios y riqueza, comodidad. Un llamado entonces, a quienes han llevado por generaciones una vida holgada, y a quienes por compromiso adquirido (nepotismo, amiguismo, compadrazgo, noviazgo, amasio), habiliten de lo que han tomado del erario y lo devuelvan en el presente, estoy muy seguro, cien por ciento, que quienes lo necesiten estarán agradecidos. Pueden imponerse, claro que sí. No caería mal una flotilla de autobuses para sacar a los turistas. Abrir un restaurante con comida gratis e inventariada para los que no tienen qué comer. Regalar vivienda por vivienda una sonrisa, un abrazo y una caja de alimentos para una semana, no para un día. Para que después de la muerte, su nombre tenga las referencias de bondad, honor, amor. No les importa, eso es verídico. Hoy, los damnificados reales, los que han perdido todo, vivienda y hogar, hasta familia directa o indirecta, deben recibir la ayuda inmediata. Y hacerla saber por los medios masivos de comunicación, de una forma ordenada y capaz. Al parecer han ayudado más los de afuera (Gobierno del Distrito Federal) que los de adentro. Se me figuran los tres chiflados pegándose de golpes en la cabeza y picándose los ojos, sin realizar la acción creativa. Así pasarán los días y la lluvia vendrá, qué importa saber si es cada año el mal tiempo, si es el fenómeno del Niño, si es el ciclo de las tormentas, lo que importa y es relevante, es dar apoyo ipso facto. Voy a parafrasear una célebre sentencia argentina que reza así: "Animémonos todos y vayan ustedes". No cabe la menor duda, que así está México.


www.falcoatlmultimedios.com