La escena de la ducha de
'Psicosis' (1960) dirigida por Alfred Hitchcock, es posiblemente una de las más
famosas y analizadas de la historia del cine.
Secuencia de un film de
bajo presupuesto, pero que acabó siendo un gran éxito. Hitchcock quiso
demostrar al mundillo de Hollywood que era capaz de hacer una película
brillante sin necesidad de gastarse una millonada. 'Psicosis' fue el mayor
éxito de su carrera y aumento su prestigio. También le convirtió en
multimillonario con los 15 millones de dólares que le correspondían del
porcentaje de la taquilla y en el tercer mayor accionista de Universal.
Película pionera no solo
en varios aspectos técnicos, sino que también sorprendió a la audiencia en ser
la primera en cargarse a la protagonista en los primeros 45 minutos.
En una escena
escalofriante repetida y versionada hasta la saciedad en televisión. "Una
obra maestra dentro de una obra maestra", de los mejores momentos
cinematográficos del cine, rodada del 17 al 23 diciembre de 1959. Fue necesaria
una semana, de los 33 días que duró el rodaje para filmar las 70 tomas de la
secuencia de 45 segundos.
Xerografía con los
fotogramas del storyborad de Saul Bass para la escena de la ducha de Psicosis.
Vía Oscars
Realizada con el
meticuloso storyboard de Saul Bass, y donde no se ve el cuerpo desnudo de la
actriz y ni el cuchillo clavándose en su piel, aunque muchos espectadores juren
haberlo visto.
Perfectamente editada y
como banda sonora, la violencia de los estridentes violines de Bernard
Herrmann, simulando los cuchillazos sobre Marion Crane (Janet Leigh).
La escena fue todo un
éxito, pero causó gran revuelo. Incluso un padre enojado escribió a Hitchcock
diciendo que su hija se negaba a ducharse después de ver la película. Hitchcock
le respondió diciéndole: "Envíela a la tintorería". Un temor a la
ducha que también tuvo la propia actriz Janet Leigh, tanto terror tenía que
incluso dejó de ducharse