México vive en la
incertidumbre, ya que el pasado primero de julio se perdió la oportunidad –no
la han escamoteado-, de cambiar, de darle una vuelta de timón a la barbarie económica
en que nos tienen sumido desde hace más de treinta años con un modelo económico
que cada día nos acerca más al desbarrancadero.
El proceso electoral
no ha llegado a su fin, y está muy lejos de ello, entonces por qué ilegalmente desde el
presidente Calderón, pasando por el presidente del IFE, Leonardo Valdés,
Televisa con todo su júbilo –que no pudo ocultar-, hasta el propio Vicente Fox,
lo declararon “presidente electo”. ¿De qué le quieren ver la cara al pueblo?
Las promesas de Peña
Nieto como el “huevo de la serpiente” de Bergam, esconde la verdad profunda y
envenenada, que al proponer en campaña las “10 acciones” nos recuerda el “Acapulco de 10” del nefasto
Manuel Añorve Baños, quien dejó tras de sí “praderas quemadas, un bárbaro anti-civil, que dejó abandonado
Acapulco en un de facto régimen de terror, pero que los mismos acapulqueños ya
han levantado un dique al mostrar con su voto la voluntad de terminar con ello,
por ello el primero de julio dio el primer paso, dándole el triunfo a Luis Walton
Aburto, y en Guerrero, inclinándose por
la única opción a nivel nacional de cambiar, de terminar con el deterioro que a
lo largo y ancho del país, vive el
pueblo de México, pero que las autoridades electorales y las de facto del
“Triunvirato” le pretenden escamotear.
Por doquier está
brotando la “pus” de la corrupción y el engaño peñanietista y su colusión con
la televisora como bien lo dio a conocer el prestigiado “The Guardian” uno de los más respetados
diarios de la Gran Bretaña, al publicar y defender el contenido del reportaje que publicó el pasado 7 de
junio, en el que sostiene que Televisa vendió en el 2005, “una cobertura
favorable” a Peña Nieto, en noticieros y programas de entretenimiento y que en el 2006 utilizó estos mismos espacios para
desprestigiar a Andrés Manuel López Obrador.

No pueden tapar el
sol con un dedo, ni el IFE, quien cada
día se ve más acorralado, al no poder dar consistencia a sus propias
resultados, cifras que no cuadran pese al rasuramiento que tan gravemente han
hecho y que además pretenden acallar las
voces de “anonymous” que desde el mismo día primero de julio, lunes y martes,
a través de YouTube, subió paginas del IFE donde aparece López
Obrador como ganador de la elección con más de cuatro millones de votos sobre
Peña Nieto. Lo cual sería suficiente para anular la elección presidencial,
convirtiendo el triunfalismo del “Triunvirato” en el Waterloo de Peña Nieto.
Mientras tanto el
movimiento #132 adquiere mayor
profundidad, y no solamente solidaridad, sino apoyo y compromisos directos de
la ciudadanía y la población en general que de ninguna manera se “traga el
garlito” que pretenden venderle, porque como lo publicara el prestigiado diario
alemán Der Spiegel, “Peña Nieto lleva consigo serios problemas de
ilegitimidad”, porque la sospecha del fraude electoral de millones de mexicanos
y observadores, deja cuando menos una duda, una cosa clara: de confirmarse su
triunfo Enrique Peña Nieto, llegará a cargo de presidente de México, muy “raspado” y con un grave problema de
ilegitimidad. Ç
Cuánto podrá durar este “Triunvirato”, antes de que
el Big Brother orweliano nos alcance? Email:gernestorivera@gmail.com