viernes, 8 de febrero de 2013

FALCOTITLAN Centinelas Por Hugo Falcón Páez


¿Qué vigilamos? No sabemos. Pero lo que sí hacemos es alertar todo lo que ocurre a través de nuestro mundo y el real. La crítica constructiva es la fuerza centrífuga y la crítica destructiva la fuerza centrípeta. Es por ello que nuestra verdad se desvanece y se pulveriza, no hay ley que mantenga el orden y la justicia. ¿Qué hacer? Seguir defendiendo la existencia de lo que ignoramos. O comprender, que la materia tiene un valor más preciado que nuestra esencia como humanos.
Ya el tema de las ultrajadas europeas se encaminó a puntos que han perdido la dimensión. Sin embargo, es pleno y absoluto que se debe hacer lo correcto y el bien, con ayuda o sin ella. Y lo repito, Acapulco no son mil ni diez mil personas, somos cientos de miles que fluctúan en la economía y sociedad de este puerto. Parte de un legendario estado quebrado prácticamente por el paso de los años, como si una fricción monstruosa la estuviera acabando. Los medios no somos los malos, se trata de quienes sí han dañado a la ciudad y a los acapulqueños, ya sin nombrar a los extranjeros, foráneos, turistas y visitantes. Pero nada les parece, a nadie. Un caso en particular fue la Iniciativa de Ley para los Periodistas de Guerrero, propuesta por el legislador Jorge Camacho Peñaloza. Fue minada, y sí, porque en su estructura está el desconocimiento del cómo los artículos iban para la mejora y progreso de quienes ejercen el periodismo, pues no por hablar de la luna y el Sol me hacen astrónomo. Ya no me refiero a un estudio exhaustivo de lo que es la libertad de expresión, la garante de su labor, la seguridad, servicio médico, seguro de vida, pensión, vivienda, las prioridades básicas de un comunicólogo, el cual es un ciudadano común. Es vital unificar una plataforma integral analizada a conciencia, aprobada y ejecutada. Y así mejorar la cotidianidad de quienes tienen el privilegio de dar la información al resto. Apuntalar el oficio, la vocación y la profesión. Para quienes se ganan la vida de ello y para ello, y son bien queridos en los medios masivos (telecomunicación, mercadotecnia y publicidad). Y si de triunfar hablamos, pues los chinos son un modelo. Ya que el empresario Chen Gwong-Beeyow, uno de los más ricos del país, vende latas que parecen de refresco. Pero en el interior se encuentra aire fresco, y actualmente es muy preciado en el oriente ese elemento natural. Latinoamérica tendrá su versión, claro que sí. Y como siempre lo he dicho. El éxito se logra de tres formas: Siendo los primeros, siendo más inteligentes o haciendo trampa. Usted elige. Ya que las órdenes las recibimos de uno mismo, considerando que los codependientes aterroricen el libre albedrío. Pero aún así nos armamos de opinión, otros ejemplos son, la salud del venezolano Hugo Chávez, ¿no se transparenta el dato si está vivo o muerto? El empate de la selección mexicana contra la de Jamaica, cero iguales, ¿otro partido de futbol arreglado? El internet para todos en México, ¿una necesidad o un monopolio nuevo por aperturarse? El gasolinazo de hoy, ¿desajustes en Pemex por la administración o este año sale a la venta la paraestatal? La Reforma Educativa, ¿pretexto para derrocar a una líder o las escuelas tendrán un cambio favorable? El IFE y el IFAI en extrema crisis, ¿garitas políticas empobrecidas por el contacto de la solapación? Seguimos amenizando el día a día con los eventos y hechos para una determinada esfera. Somos soldados que guardamos una postura, una lucha de mentes, un combate desde la psique, una guerra desde el alma. Somos quienes vigilamos lo que no nos interesa y lo que no nos beneficia. Somos la modernidad pero con arcaicas costumbres, somos los que mueren hasta vivir al hartazgo, somos los que deben calmar el ímpetu. Así como somos, centinelas.