Diputado Carlos Reyes Torres,
Presidente de la Mesa Directiva de la LXI Legislatura al Congreso del Estado.
Mtro. Robespierre Robles Hurtado,
Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia.
Diputada Flor Añorve Ocampo,
Presidenta de la Comisión de Gobierno del Congreso local.
Licenciado Marco Antonio Leyva Mena,
Presidente municipal de Chilpancingo.
Ciudadano Florencio Salazar Adame,
Secretario General de Gobierno
Señoras y señores secretarios de despacho de la Administración Pública Estatal.
Titulares de los Órganos Autónomos del Estado y Órganos con Autonomía Técnica.
Delegados de las dependencias federales.
Medios de comunicación.
Señoras y señores:
Hoy, 22 de diciembre, los Tres Poderes del Estado nos encontramos reunidos aquí, para recordar a José María Morelos y Pavón a doscientos años de que fue fusilado, y a doscientos cincuenta años de su nacimiento.
Permítame recordar episodios de José María Morelos en este lugar. Aquí, fue escenario de un hecho trascendental: la preparación y la construcción de un nuevo País, hace 202 años.
Aquí, José María Morelos y Pavón hizo leer sus Sentimientos de la Nación, semilla del primer texto constitucional de México. Antes que en la Iglesia de la Asunción, aquí lo escucharon Quintana Roo, Ignacio Rayón,
Inspirado en aquel documento, y por el impulso libertario y revolucionario que se había despertado en diversas partes, se convocó al Congreso de Chilpancingo, cuyas resoluciones dieron forma y fondo a la Nación Mexicana.
A 200 años de su muerte, en palabras de Lucas Alamán, Morelos fue el hombre más extraordinario que había producido la Guerra de Independencia.
Morelos fue el genio militar más audaz y emprendedor en toda la Nueva España, según su enemigo, el Virrey Calleja.
A 200 años de su muerte, recordamos al hombre de carne y hueso, al estadista, que sabía cuál era su papel: emprender grandes transformaciones y encabezar el movimiento social que nos dio una Patria libre.
Por esta razón, quisimos conmemorar en este lugar, el Bicentenario Luctuoso del Generalísimo Morelos, en una sesión formal que reuniera a quienes tenemos la obligación de cumplirle a la sociedad que nos mandata.
Es un encuentro no sólo con el héroe de la independencia, sino con el hombre que se atrevió en su tiempo a pensar en un futuro distinto para nuestra Patria.
En medio de independistas que se dividían entre monarquistas y nacionalistas, entre centralistas y federalistas, aparece Morelos como un visionario que pensó cual era el destino del país.
Apareció Morelos… en medio de la total adversidad, cuando los jefes insurgentes encabezados por Miguel Hidalgo habían sido apresados y fusilados, y éste tomó la estafeta para continuar con la lucha independentista.
Apareció Morelos… como un hombre que unió a todos los nacidos en estas tierras por una sola causa: liberar a la Nueva España del yugo español y construir un País.
Morelos fue el primer mexicano, aunque no llegó a serlo, que vio el México republicano, liberal, federal y democrático, que ahora podemos disfrutar en el artículo 40 de nuestra Carta Magna.
El futuro país que imaginó Morelos, es al final de cuentas, el que habría de consagrarse en la Constitución Federal de 1824, en la Constitución Liberal de 1857 y en la Constitución Revolucionaria de 1917.
Ese fue el país que imaginó Morelos… ahora el reto que tenemos, es imaginar el Guerrero que queremos.
Por eso, esta ceremonia reviste una especial importancia, porque es una oportunidad para refrendar cual es nuestro compromiso desde la trinchera en la que nos encontramos.
Estamos aquí no sólo para recordar a un hombre que imaginó y construyó un país libre, soberano, igualitario y con leyes que todos acataran.
Estamos aquí para pensar y actuar por un Guerrero mejor.
Estamos aquí porque queremos un futuro distinto para Guerrero, alejado de la violencia, la pobreza y la impunidad.
En cada ocasión, siempre he manifestado que somos muchos más los que queremos que Guerrero transite hacia otras circunstancias, que aquellos que viven en la obscuridad de lo ilegal y que están instalados en la maldad.
Por ello, reconocemos, y sobre todo, agradecemos al presidente Enrique Peña Nieto, el respaldo que ha tenido con nosotros en estos tiempos de complicación y adversidad.
Saludo y expreso también mi total reconocimiento a la Defensa Nacional y a la Armada de México.
Mi reconocimiento a los buenos policías, a la Policía Federal y a la Gendarmería por desplegar sus efectivos en el combate a la inseguridad pública.
Señoras y señores:
Los convoco a observar y a seguir los pasos del generalísimo Morelos, que actuó pese a la adversidad de su tiempo y logró construir un País.
Los convoco a pensar y construir un Guerrero mejor, donde impere la justicia, emerja la verdad, se acuerde la reconciliación y se alcance la paz.
De las circunstancias que vivimos, tenemos que aprender de ellas y salir adelante.
Frente a la adversidad, tenemos que responder con trabajo.
Frente a la adversidad, no hay que tiempo que perder.
Frente a la adversidad, no hay que olvidar que somos una tierra plural, diversa, diría espectacular, de mares y montañas, de orígenes que nos dan orgullo, de nahuas, mixtecos, amuzgos y afromestizos que acompañaron a Morelos en sus campañas militares.
Somos una tierra que tiene más razones para luchar y salir adelante, que frustraciones que nos hagan sucumbir y fracasar.
La grandeza de Guerrero está ligada a la figura de Morelos.
Si Morelos nació en Michoacán, en Guerrero lanzó al mundo sus ideas.
Aquí en este lugar, se construyeron los poderes, se imaginaron los tribunales.
Aquí en este lugar, Morelos pensó en la igualdad, en la educación y en la democracia.
Por ello, no nos debe extrañar que la Federación ponga sus ojos en el lugar donde él formó a México
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Muchas gracias