miércoles, 18 de enero de 2012

DE OFICIAL A MAGISTRADO PRESIDENTE, EDGAR ELÍAS, DESTACADO GUERRERENSE Marcelino Miranda Añorve





"La justicia es la constante y perpetua voluntad de dar (conceder) a cada uno su derecho".
Ulpiano

Edgar Elías Azar, es originario de Acapulco, jurista destacado y pertenece a la generación de jóvenes políticos y servidores públicos que encabezó e impulsó el mejor y más preparado de los gobernadores de Guerrero, José Francisco Ruiz Massieu quien fue: Un político en  ejercicio e intelectual en reflexión constante; de reconocida disciplina para el trabajo; de ahí su exigencia en los resultados, su dureza ante la mediocridad y su gozo en las conversaciones inteligentes; de sólida cultura política, su profundo sentido jurídico, sus altas calificaciones de administrador público y su tendencia de estadista, le indujeron a  conformar un equipo de colaboradores entreverando a nuevos cuadros políticos y otros con experiencia en el difícil quehacer de la política.

A esa escuela de servidores públicos, pertenece Edgar Elías Azar, incorporado al equipo de José Francisco Ruiz Massieu, desde los años ochenta en la Secretaría de Salud y a partir de 1887 a 1893, fue nombrado secretario de finanzas por el gobernador Ruiz Massieu, su maestro y amigo de toda la vida.

Edgar Elías Azar, es doctor en derecho y tiene tres maestrías, de los pocos guerrerenses que han ocupado el cargo de Magistrado  Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal. Otro guerrerense que se desempeñó como Magistrado Presidente, fue  el licenciado Donato Miranda Fonseca de 1955 a 1958, siendo Presidente de la República Adolfo Ruiz Cortines, cuando dicho Tribunal, era del Distrito  y Territorios Federales.

Lo singular y admirable del Magistrado Edgar Elías, es que llega a tan importante puesto, después de haber ocupado la posición más modesta que tiene ese Tribunal: oficial judicial, escalando casi todos los puestos  que hay en ese órgano, menos actuario. Fue mecanógrafo, taquígrafo, archivista, secretario de acuerdos de Juzgado de Paz, Juez de Paz, prácticamente 30 años de servicio. Toda una carrera en la administración de justicia, en el tribunal más grande del mundo.
En esa singularidad del Magistrado Edgar Elías Azar, sobresale el hecho de haber llegado a la Presidencia del Tribunal a través de la vía del voto de sus compañeros magistrados por primera vez en diciembre de 2007 para el periodo de cuatro años (2008-2011) y lo histórico consiste en que a principios de diciembre de 2011 fue reelecto para la etapa de (2012-2015) también a través de un procedimiento democrático, en el que  sus compañeros magistrados, le refrendaron su confianza por cuatro años más al frente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal.
Sentir el Derecho, en la dimensión más amplia del término, es posiblemente la tarea fundamental del auténtico jurista y en  el Magistrado Edgar Elías Azar, se percibe que lleva en su entraña el ingrediente de la emoción y la obsesión por la administración de justicia. ¿Y cómo no, si prácticamente empezó desde el trabajo más modesto en ese Tribunal?
Lo extraordinario de su vida cotidiana y por ello, ha logrado un desarrollo profesional creciente, consiste en su disciplina y dedicación  en el estudio y en su trabajo: sus numerosas reuniones con las áreas de alta prioridad del Tribunal, su permanente comunicación con las salas civiles y penales, con el Consejo de la Judicatura, con delegados políticos, con representantes de la Procuraduría de Justicia del D. F. y del Gobierno Capitalino o con la Asamblea Legislativa y con innumerables instituciones. Y sobre todo su buen manejo con los medios de comunicación.               
Al frente del TSJDF tan complejo, le ha tocado vivir de todo: poner en marcha leyes polémicas como los matrimonios entre personas del mismo sexo. Las grandes leyes como el divorcio sin causa y que ha sido muy exitoso, pues de cada tres divorcios, dos son promovidos por mujeres. Otra de las reformas que el magistrado Elías Azar impulsó es la de “oralidad”. La adopción entre parejas del mismo sexo que  se polemizó tanto. Otra ley que se impulsó, fue la de justicia para adolescentes, además de remodelar y equipar diversas instalaciones del TSJDF. Entre otras muchas acciones.
En síntesis, el que un guerrerense haya tenido un desarrollo profesional admirable, como Edgar Elías Azar, debe ser grato, estimulante y ejemplo para las jóvenes  generaciones de abogados y en general para  todos, por que es a base de estudio, disciplina, emoción y deseo de superación como se alcanza el éxito. ¡Felicidades Magistrado Edgar Elías Azar!