domingo, 10 de enero de 2016

INFLEXIONES DESDE EL INSOMNIO/ Mucho miedo JOSÉ MARÍA ARELLANO MORA.

 
JOSÉ MARÍA ARELLANO MORA
La mayoría de las veces tomamos la información de los medios impresos y electrónicos como la única existente; por otro lado aquella de la Internet y de las redes sociales.
Siendo chavo me gustaba leer la sección de nota roja del periódico Excélsior. Me impresionaban los hechos, también conocí las expresiones “bebidas espirituosas”, “mujer de la vida galante”, entre otras. Con el tiempo dejé por la paz esa sección.
En los años sesentas, solamente publicaban fotografías de cadáveres, sangre y partes de cuerpo humano de crímenes, era la “Alarma!”. Y ocasionalmente “La Prensa”. De ahí ningún otro ni por accidente. Parecía que esos hechos se suscitaban en otro mundo, otra colonia y con otro tipo de personas. En una ocasión unos de mis tíos llego con un ejemplar de esos y me invadió la curiosidad, lo hojeé y en verdad me desconcertó. La dejé al instante.
-“Tío, ¿te gusta esta revista?” -le pregunté al pariente.
 -“No sobrino, nada más la compré para pasar el tiempo” -fue su respuesta inmediata.
Recientemente en un puesto de periódicos llegó un señor de la tercera edad a ver los diarios en el exhibidor y empezó maquinalmente a cubrirse con sus manos a la altura de su vista, por el momento pensé: “el sol le molesta”. Seguí viendo los titulares de periódicos y portadas de revistas. Y, el señor continuaba con el movimiento de sus brazos.
-“Cómo es posible que publiquen esas fotos, de muertos, sangre y heridos, qué criterio” –el señor se dirigió a mí.
-“Si” –le contesté entre sorpresa y duda. No había caído en la posibilidad que hay gente que no le gusta ver esas imágenes de accidentados y ensangrentados, se les hacen repugnantes.
Entonces comprendí que el señor cubría con sus manos las imágenes de los impresos y no porque le molestara el sol.
Esto me recuerda que hace nueve años me contactó un amigo –mejor conocido como “Mr. Ultra”- solicitándome una portada para estuche de DVD.
-“Es sobre una colección particular de DVDs que estoy haciendo de asesinos seriales ¿conoces el tema?
-“Poco, no he leído mucho al respecto”.
-“Fue Robert Ressler, quien acuño el término ‘serial killer’ (asesino en serie). Un criminólogo que en su andar se encontró con hechos discordantes, no comunes en un asesinato. Aquí la causa no es por robo, ni venganza, ni pasión o por género; es indistintamente... Los asesinos los realizan por el simple hecho de matar; el placer psicológico del acto. Esto caracteriza a un asesino serial…” –a de manera de un experto me fue diciendo.
Llegué a casa y me dispuse a plantear una solución gráfica para la portada, como siempre buscando la mejor solución. Para ello investigue sobre los asesinos seriales e imágenes que me evocaran y me ayudaran para la propuesta. Desde aquella ocasión, al menos por acá en México, vagamente se oía de este tipo muertes provocadas por uno asesino serial. Eso de “asesino serial” ha creado mucho pánico en personas de la tercera edad, principalmente en las mujeres. Sobre este tema, debido a la tergiversación de los medios se genera miedo ante estas noticias, las cuales han impactado entre la comunidad tlatelolca.
Ha provocado pánico, no es malo tener miedo, el miedo es una reacción natural ante un peligro pero es malo vivir con él.
Envalentonarse para erradicar el miedo, tal vez sea la mejor manera. Pero no del todo es bueno, hay que estar precavidos pero no caer en la obsesión ni menos en la lógica inmediata.
Se pregunta y se demanda una pronta solución a la inseguridad. Pero se busca la “fórmula mágica” que de inmediato lo resuelva. Ante ello sugiero que en las reuniones de vecinos se llegue con propuestas concretas; y, en las mismas, en la orden del día considerar el tema de la seguridad para buscar la manera de poder asegurar un método que nos ayude a estar alertas y ayudarnos entre los residentes de las tres secciones.

Esto pasó y pasa en la Ciudad de México y también en Tlatelolco.