jueves, 31 de marzo de 2016

LA NETA DEL PLANETA Karmelynda Valverde DE MEROLICOS Y ‘’RANGUÑADAS’’


En los años sesenta, fue muy popular la interpretación del merolico que hacía el  entonces bailarín e incipiente comediante, Sergio Corona. Recuerdo que mi finado tío, Domingo Díaz Pamplona, quien por entonces piloteaba un avión comercial de Aerolíneas Vega, nos trajo a regalar este disco LP, con la magistral  interpretación que el ahora también actor dramático, realizaba de este personaje infaltable en toda feria pueblerina.

‘’Chumina animal del demonio y atrás de la raya joven que estoy trabajando’’ fueron dos frases con las que don Sergio Corona iniciaba las rutinas interpretando al personaje del Merolico, una de las cuáles incluía la del Fosfovitacal que servía, según decía, para prácticamente todo mal ‘’señora,  si en la  mañana la  boca le amanece sabiendo a centavo, si su saliva le sabe a tierra, lodo, a caño, tome fosfovital’’. Pero también lo recomendaba para solucionar otros ‘’males’’ ‘’si usted busca, boda,  matrimonio o arrejunte, tome  fosfovitacal’’.

Todo esto recordé, antier cuando algunos compañeros de la prensa atestiguamos la reunión que tuvo el presidente Omar Estrada con los compitas del Comité de Tianguistas y Ferieros pozoleros, ahí en el corazón del polémico tianguis de Semana Santa, a la altura del Hotel Montero. Pues bien, luego de los discursos,  donde el alcalde les anuncio que el Cabildo que preside, les daba permiso y bendición pa’que siguieran instalados otra semanita más y que serían exonerados de apoquinar un pisajito extra, con la condición de que alivianaran a la paisanada con descuentazos en sus mercancías y de la réplica agradecida y compromiso de los tianguistas de que así lo harían, tuvimos la oportunidad de presenciar la rutina de un joven ofertando cobijas, almohadas y colchas de Tlaxcala. ‘’Mire, aquí le traigo la oferta, vea, cheque, cualquier mujer quiere tener a un tigre en su cama, pues vea, aquí tiene una cobija ‘’kinsaI’’ con el dibujo de  un hermoso tigre, el sueño de toda mujer, y aquí le va otra cobija, y una almohada, y otra más, por 200 pesos’’.

No pude menos  que sonreír al acordarme de  una comadrita de Chichihualco, de mi rodada en años, que siempre me hace la  misma pregunta ‘’¿En verdad comita, no le gustaría volver a tener marido?, ay porque yo sí, aunque me deje la toalla mojada en la cama, los chones tirados en el baño, la pasta de dientes aplastada y el lavabo escupido con pasta, yo si quiero volver a tener un viejo aunque ya no me haga ‘’el hecho’’ pero que siquiera me ‘’ranguñe’’ la espalda’’. 

Debo  decir que mi comadrita ha sido prolífera en maridos pero que desde hace unos tres años, no  pesca  ni un resfriado y su alucine en busca de marchante va en aumento. Sin ningún rubor confiesa su alucinada necesidad de tener a alguien ‘’enquesea para que me ranguñe la espalda’’, por eso me acordé de ella al escuchar la tarabilla del jovenzón señor, ofertando cobijas tlaxcaltecas. Digo,  ya que mi comadre no puede tener a un felino encamado en vivo y a todo color, pintado en colorao como estaba en la cobija.


Ah, pero también me acordé mucho de Osorio Chong, y no porque se parezca a felino alguno, pues ni siquiera los ojos michis tiene este ñor, arajo hermanito chulo, pero neta que dan ganas de ‘’ranguñarlo’’ y no precisamente la espalda, sino porque ya estuve bueno de tantos visajes, puestas de escena, cuicos pa’rriba y cuicos pa’bajo, chincualeadas gendarméricas ¡y taná seguridad!. Aunque viéndolo bien lo que necesita después de una buena ‘’ranguñada’’ es una mega encobijada, con estas cobijas tlaxcaltecas, pa0que sude bien la calentura.