Qué bueno que el
comisionado de la Policía Federal Enrique Galindo Ceballos nos aclara que sus
muchachos están aquí por la ocupación hotelera y no por el índice delictivo. En
esa lógica habría que esperar que el secretario de Turismo Enrique de la Madrid
mande al personal de la Sectur a combatir el crimen.
En este mundo del revés
hemos estado totalmente equivocados al pensar que el Gobierno Federal nos
procura una estrategia de seguridad. Lo dicho por el comisionado evidencia que
se trata de simple mercadotecnia para vender la percepción de que, como dijo
textualmente, “Acapulco está tranquilo”.
¡Qué a todo dar! Los casi
40 asesinatos en lo que va de Semana Santa no importan para el comisionado, lo
importante para él es que haya buena ocupación y por eso es que aloja a sus
policías en hoteles para que Acapulco mantenga sus índices. Los acapulqueños
pueden ahogarse en sangre y morirse de miedo. ¡Al fin que hay turismo!
De esa manera la desgracia de muchos se ha
convertido en la fortuna de unos cuantos. El hospedaje de policías se ha
convertido en una suerte de subsidio disfrazado a la hotelería. Un incentivo
selectivo, por cierto. Acapulco cuenta con 206 hoteles y los federales se
alojan exclusivamente en cinco, a los que deben 32 millones de pesos.
Al menos deberían mudarse
de vez en cuando para beneficiar a otras hospederías y no solamente al 2.4 por
ciento de la planta hotelera, para que la bondad de la estrategia de seguridad
que más bien es turística pero sabe como a engaño (parafraseando al inmortal
Chavo del Ocho), realmente ayude a la economía de todos los hoteleros, a sus
trabajadores, y no a una minoría privilegiada de dirigentes que tienen en la
inseguridad y la violencia el negocio de sus vidas.
Su fortuna no ha sido la
misma de miles de familias que han visto a sus seres queridos y a personas
conocidas tiradas en un charco de sangre; ni la de muchos comerciantes que
sufren pérdidas millonarias por las extorsiones y secuestros.
Así que ya lo sabe. Si es
de los que creen que la violencia, la inseguridad y la delincuencia son
problemas sociales, el maestro Galindo Ceballos le ha demostrado que usted
lleva al menos tres años equivocado.
El enfoque es economicista
y no importa el costo de unas miles de muertes cuando hay millones de pesos en
derrama económica y el alquiler de habitaciones para sus muchachos, aunque este
beneficio, sea para unos cuantos. ¡Una lógica aterradora! ¿No cree?
jalepezochoa@gmail.com