Los despojos a la
nación son vastos y se necesitaría reunir en una biblioteca del horror los
atracos de políticos al estado mexicano. De Calles a la triada del horror:
Salinas, Zedillo Fox. Y del robo en despoblado de Calderón y su herencia de más
de cien mil muertos y cinco centenas de miles de desaparecidos que el
presidente de los cochupos oficiales como la casa blanca y los muertos de
Ayotzinapa, sigue al pie de la letra.
El setenta por ciento
del territorio mexicano es usurpado al estado por la delincuencia organizada,
cedido o en comodato o en complicidad.
El sainete del
helicóptero salvador de rodillas vacacionales que permitió la renuncia de una
cuate de EPN, de apellido Korenfeld, no es suficiente para parar este
latrocinio que tuvo en el gobernador panista de Morelos, a otro ejemplar
llamado Sergio Estrada Cajigal, que gobernó con sus amigos a nada más ni nada
menos que un helicóptero para visitar a sus innumerables novias o el
helicóptero que en el gobierno de ZTG, era prestado para hazañas acuáticas en
Acapulco en vez de acudir a las clínicas de la Montaña de Guerrero donde los
niños morían por picadura de alacrán.
Este breve bestiario
alado sólo es un ejemplo singular de que los hombres del poder, utilizan el
erario, no sólo para engrosar sus cuentas personales, sino que las herramientas
que el estado tiene para la gente son destinadas con fines familiares, ejemplos
hay muchos. Por eso llama la atención las recientes declaraciones del ex
gobernador de Guerrero, René Juárez Cisneros al firmar que “en diez años el PRD
desmadró al estado..” Seguramente el Brody
-originario de la Laja- como le llaman sus íntimos, al decir esa trastada, ha
olvidado todo el daño que le hicieron a Guerrero los gobiernos priistas que
durante poco menos de un siglo han gobernado a la entidad. Y el propio ex
gobernador finge demencia al no hacer un balance con rigor de su propia
gestión, plagada de atracos, y la corrupción que no tuvo freno al interior de
su primer circulo. Los guerrerenses no olvidan las francachelas con millones de
pesos con cargo al erario del estado que su secretario de finanzas tiraba a las
patas de los gallos, o los negocios con Kamel Nacif en ese elefante blanco del
Parque Industrial del Ocotito, las carreteras con la famosa y efímera empresa
“Tres construyendo”, y la misma “Ciudad de los Servicios”, que ni es ciudad ni
es de los servicios, porque exactamente en el centro del lecho del Huacapa,
colocaron el territorio del estado de Guerrero, sobre un manto de boñiga que
cruza por el palacio nuevo límpida y apestosa. O los despilfarros de sus
íntimos que durante su administración brincaron de una secretaría a otra: Pano
Cruz fue el espejo de su nepotismo y Miguel Marén que actualmente ocupa un
cargo para el que carece de perfil.
Habría que preguntarle
a RJC, senador del tricolor, que haga una reflexión y que de a conocer los
nombres de los que desmadraron al estado y que no pluralice en el sentido de
que sólo los perredistas han desmadrado al estado, porque si hacemos cuentas,
los gobernadores de la frustrada alternancia en Guerrero, Zeferino Torreblanca
y Ángel Aguirre, el primero llegó del PAN y el segundo el PRI.
En esta línea del
tiempo, la coyuntura actual tiene matices. El desmoronamiento del régimen de
partidos de estado, en Guerrero, podría propiciar darle un viraje de noventa
grados al ejercicio de la política.
Mientras se hacen
fintas de cambiar de partido para presionar o se suman a la preventa de garaje
de diputaciones, presidencias municipales y senadurías que han recibido un
golpe a los amarres ya establecidos con la paridad de género.
La candidatura de
Beatriz Mojica Morga cobra un gran sentido histórico para la ciudadanía y
partidos políticos de Guerrero. Y como
el estado se merece un cambio la pregunta obvia de un millón y medio de
guerrerenses de frente a los comicios de junio es por qué votaría por Beatriz
Mojica Morga, la pregunta es simple, porque representa un cambio generacional.
Es una genuina militante del sol azteca y una mujer preparada. Conocedora del
ejercicio de la política y vinculada desde siempre a la militancia y una mujer
con un experiencia en el ámbito académico con maestrías en el ITAM y en el
extranjero.
Pero sobre todo, porque
con el triunfo de BMM, surgiría en Guerrero una nueva izquierda producto de
las mutaciones y adherencias de gentes
tanto de partidos políticos como de la sociedad civil; organizaciones de los
pueblos originarios y de todo tipo que hoy claman por ser visibilizados. BMM
representa no solo la paridad de género, sino que lleva implícita la semilla
del cambio desde el momento en que diversos grupos de la entidad suriana la han
apoyado en este trecho de la campaña.
Las condiciones
actuales, le permitirán a la ciudadanía votar no por el partido, sino por la
persona.
Y tanto el voto útil,
como el voto cruzado hoy serán determinantes, porque a la pregunta de por qué
votaría el pueblo de Guerrero por BMM es muy simple la respuesta, no solo para
impedir el regreso del tricolor y su flora y fauna de dinosaurios. BMM representa
un nuevo aire, un cambio no sólo de género, sino de forma de entender la
política y ponerla en práctica.
El tricolor en
Guerrero, va quebrado y dividido y se va enfrentar a un Peña Nieto cuestionado
y en caída libre que le restará cientos de miles de votos.
De reojo
Que tal si las
izquierdas se unen y MORENA y Movimiento Ciudadano hacen equipo con el proyecto
de BMM y salen a la calle el 7 de junio a votar por la verdadera alternancia,
¿qué pasaría en Guerrero?