domingo, 18 de octubre de 2015

El Pueblo de Ayutla Derrotó a la Partidocracia Carlos Reyes Romero


“Los tiranos y los corruptos gobiernan hasta que el pueblo los derroca.”
De la sabiduría y experiencia popular.

En Ayutla de los Libres, Guerrero, el pueblo derrotó contundentemente a la partidocracia.
A pesar de todo el terror, las amenazas, la coacción y la compra de votos que el PRI, el PVEM y el PRD, unidos en santa alianza, pusieron en juego durante toda la semana que está por terminar, este domingo fueron contundentemente derrotados por la avalancha popular que confirmo el triunfo del sistema de usos y costumbres sobre el sistema de partidos políticos para elegir de ahora en adelante el Ayuntamiento de este municipio.
A la hora de escribir este artículo, la tarde del domingo 18 de octubre, los resultados conocidos acreditan que a esta Consulta concurrieron más de 11 mil ciudadanas y ciudadanos, de los cuales más de 52% votaron a favor del sistema de usos y costumbres, 45% por los partidos políticos y el resto 4% se abstuvieron.
Ha sido una votación sin precedente en el país y que rebasó con mucho la votación obtenida por cada uno los tres principales partidos del municipio en los comicios del pasado 7 de junio. En aquel entonces a la coalición PVEM-PRI le fueron oficialmente reconocidos 9,203 votos,  al PRD 8, 918 votos y al Partido de los Pobres de Guerrero 2, 810 votos.
El pasado 10 y 11 de octubre se realizó la primera etapa de esta Consulta, ordenada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE) al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Guerrero (IEPC) para que consultara a los habitantes de todas las comunidades y colonias de Ayutla de los Libres, sobre si querían cambiar la forma de elección de sus autoridades municipales del sistema de partidos políticos al sistema de usos y costumbres, como coloquialmente se denomina a los sistemas normativos propios que utilizan el 20% de los municipios del país para elegir sus Ayuntamientos.
Los resultados de esa primera etapa fueron contundentes: 88 por ciento de las 69 comunidades consultadas en esos dos días votaron a favor de cambiar de régimen de elección, para pasar a elegir el Ayuntamiento mediante usos y costumbres, es decir mediante asambleas comunitarias, tal como ahora se eligen en el estado de Guerrero todas las comisarías, delegaciones municipales y comités de colonias que reconoce la ley orgánica municipal.
Esto causó alarma y profunda desesperación entre los dirigentes y representantes populares de los partidos políticos del municipio, el distrito y el estado, al grado de que a pesar de la larga disputa postelectoral que el PVEM-PRI y el PRD sostuvieron ante los tribunales electorales por la presidencia del Ayuntamiento de Ayutla, ahora de plano, como los hermanitos siameses que son, olvidaron sus rencillas y agarraditos de la mano unieron fuerzas y sobre todo mañas y recursos, en lo que son expertos, para tratar de descarrillar el imparable triunfo del sistema de elección por usos y costumbres.
Ahí sí, de plano no se midieron y se lanzaron con todo. Lo mismo amenazaron a las comunidades y colonias conque perderían los apoyos de los programas federales y estatales, como recurrieron a la descarada coacción y compra de comisarios, delegados, presidentes de colonia y votos.
Muestra de ello es el tríptico que los tres partidos siameses repartieron por miles en el municipio, en cual aseveran que “el sistema de usos y costumbres es la forma de autogobierno de una jurisdicción que se rige a sí misma como anarquismo”, que dicho sistema llevará a “no recibir recursos por parte del gobierno federal por lo que no habrá más obras en el municipio”; que “todos los programas de apoyo con el 65 y más, Sin Hambre y Prospera entre muchos otros desaparecerán”; que no habrá “más apoyos de fertilizante a los campesinos”, que “los Centros de Salud desaparecerán y por consecuencia los medicamentos, consultas, estudios de laboratorio correrán por nuestra cuenta”; que “desaparecerán el Ministerio Público y los Juzgados de Paz”; que no“tendríamos derechos humanos”; que “se tendría toque de queda”; que “la mujer no tendría ni voz ni voto” y para rematar afirman que “El sistema de partidos políticos ha sido de suma importancia para el progreso de la ciudadanía ya que su lema es el de ayudar a la ciudadanía (sic..) en todo momento con gestiones y apoyos económicos, que se perderían con los usos y costumbres.”
Todavía más. Incurriendo en un grave delito electoral el PVEM-PRI y el PRD incluyeron en el tríptico de marras al PAN, al PT, y a Encuentro Social, Movimiento Ciudadano, Morena, Nueva Alianza y al Partido Humanista, partidos que seguramente se deslindarán de lo afirmado en este panfleto, para evitar que su imagen quede manchada por la conducta estos bribones electorales, que al parecer han utilizado indebidamente sus siglas y nombres.
En Ayutla de los Libres ha aparecido una nueva faceta del terrorismo de estado, la de la partidocracia, que se viene a sumar a la criminalización de la lucha social, las desapariciones forzadas, la tortura y las ejecuciones extrajudiciales que el gobierno pone en práctica contra los disidentes y opositores al régimen autoritario y antidemocrático que el PRI está volviendo a imponer en el país; ahora desgraciadamente con la colusión de un PRD que cada día se hunde más en la descomposición moral y política y ávidamente encabezado por el PVEM que se está convirtiendo aceleradamente en el partido más mercenario, corrompido y corrupto del país.
La realidad está mostrando que la partidocracia no aprende de sus errores, ni está escuchando ni atendiendo la enorme inconformidad social que envuelve al país.
Iguala es para ellos, para el PVEM-PRI y el PRD, un hecho lamentable pero que ya pasó; en cambio para los pueblos es una barbarie que ninguna manera no debe volverse a repetir.
Así se han bifurcado los caminos; así será el destino de México de ahora en adelante.
Pese a todo el cochinero que pusieron en práctica el PVEM-PRI y el PRD, en Ayutla de los Libres, Guerrero, los pueblos han comenzado a sepultar abierta y definitivamente a la partidocracia.
Es la hora de enarbolar las banderas de la libertad, la justicia, la igualdad y de organizar las nuevas batallas contra la injusticia, la corrupción y la impunidad, que es lo único que nos ha traído el actual régimen político y su partidocracia.

Octubre 18 de 2015.