Entre las actividades, se presentaron talleres de pintura y forrado artesanal de botellas, además del curso-taller La Familia, la mejor fortaleza contra las adicciones, así como funciones en el Planetario Móvil.
Por su parte, los servicios del DIF Guerrero entregaron 250 despensas, 50 pares de zapatos ortopédicos, se dieron más de 100 consultas médicas, 10 trámites para acta de nacimiento extemporánea, 50 trámites administrativos de Registro Civil y cinco matrimonios.
Al recorrer los diferentes espacios de las actividades, la presidenta del DIF Guerrero, Marxitania Ortega resaltó que las Caravanas Culturales por la Paz son una invitación para caminar juntos, “para que nos reapropiemos de los espacios públicos y busquemos formas pacíficas de convivencia".
Además reconoció la participación de los habitantes de los 16 municipios de la región Norte, que durante 10 días asistieron a los proyectos de desarrollo artístico y trabajo comunitario.
Por su parte, la subsecretaria de Formación y Vinculación Cultural, Citlali Guerrero Morales resaltó que las Caravanas son un esfuerzo sin presentes en el estado y luego de cinco meses de recorrer el territorio guerrerense, “lo que queda claro es que sus habitantes están ávidos de actividades culturales y piden un trabajo más constante en esa materia, no quieren iniciativas fugaces".
Por la tarde, el grupo musical Majestad Sierreña, arrancó la barra artística de la jornada. Enseguida se presentó una muestra de los proyectos que se aplicaron en la región, con la participación de los Diablos de la Sierra de Tlacotepec y los jóvenes asistentes al taller El gusto y el son, la mejor opción.
Por último, luego de presentarse la obra teatral Pato, muerte y tulipán, el Grupo Cañaveral puso a bailar a todo el público para concluir una emotiva primera jornada del Festival.